Nuestro primer encuentro

sonrio soltando la mano de Etdike comenzando a lebantar la parte superior de este para bajar sus labios al pecho del demonio lamiendolo por completo para luego diriguirse a sus pezones jugando con ellos, lamiendolos y mordisquiandoloas hatas que estaban ambos duros
uhm...
miro la parte baja de et sonriendo con algo de lujuria bajando la cremayera con sus dientes lentamente

Nuevamente su ser entero se estremecio, en lo que su mano apreto confuerza el aire al sentirla separada de la del amo, sintio las deliciosas caricias sobre su pecho , y la sangre acumularse en su ruborizado rostro, asi como en otra parte. Dejo escapar un suspiro que se noto como vaho, al sentir la calides del rostro de su amo tan cerca de su entrepierna. Cerro los ojos con fuerza, podia imaginarse lo que seguia, y ante tal conjetura se sintio apenado, agacahndop el rostro.

todo estara bien
sonrio bajandole le boxer con losdientes soltando el mimebro exitado de etdike, sonrio con malicia mientras lo tomaba comenzando a lamerlo a todo su largo

Haiiii- la respuesta se tranformo en un sorprecivo gemido, al sentir la calides de la lengua sobre su miembro. Se sonrojo nuevamente avergonzado por el extraño sonido que de su boca se habia escapado, se llevo la mano a la boca; mordiendola con fuerza intentando evitar que se escapace nuevamente un gemido.

se levanto lentamente quitandole las manos de su boca, le habia encantado el gemido de etdike y queria escuchar mas de el
quiero escucharte
dijo enguyendo a la par su miembro comenzando a moverse lentamente

Ahhh- lanzo un rapido y ondo gemido, al tiempo en que su rostro mse coloreaba por completo de rojo, una enorme corriente electrica lo recorrio por completo, entrecerro los ojos , mientras pequeños gemidos resonaban en la habitacion- Ahhhh ahhh ahhhh

sonrio al escuchar aquellos virgenes gemidos comenzando a deleitarse por aquel miembro
una carne nueva
pensomientras lamia a lo largo el miembro de et

Ladeo el rostro, avergonzado, degustado, cerro los ojos con fuersa, permitiendose el subestimado placer de gemir. Gemidos que agonizantes, salian de su boca, ahogados en la agitada respiracion, descontrolados, pasionales. Levanto la mirada, con suileza, se esbozo una culpable sonrisa en su rostro. Volvio a cerrar los ojos, dejandose quiar, sin mediar palabra o pensamiento que no fuesen las demostraciones de su placer.