Dando a la Practica

-si, algo.
Bueno demaciado, jamas habia dormido con tanta tranquilidad. Las mayorias de las veces me pa pasaba preocupando de que esos bichos se metieran bajo mi piel y empoyaran sus huevos-

Hiso un gesto extraño a tal conmocion entre esa mirada del muchacho.
A pesar de haver pasado horas a su lado, aun no se dejaba de asombrar por esa bella sonrisa, sus ojos, su rostro, casi para el era todo perfecto

Agito su cabeza ante esas desdichas que le causaban ciertos sentimientos que afloraban, esas emociones nuevas, antiguas que habia guardado

-Si, eso, Kei...a pesar de todo, te quiero-

Alfo que confesar? esas palabras solo salieron y miro hacia abajo, una declaracion de antemano a lo que problablemente se enfrentaria amando a un vampiro

Una pequeña gotita resbalo por su nuca al escuchar la primera confesion, hablaba de pesadillas o temores sobre demonios? A pesar de eso, sacudio la cabeza y se le escapo una cantarina risa.

Su lindo Raziel... podia decir libremente que era el humano mas hermoso que habia visto en toda su vida, sus ojos carmines, esa pequeña boquita tan deliciosa, su cuerpo menudo pero no por ello menos atrayente... y su voz, se le cortaba la respiracion de tan solo oir como decia su nombre, jamas habia sonado tan bien... aunque esa otra confesion le dejo algo ido.

- Raziel...? - esos gestos, esas acciones... acercandose nuevamente a el y ahora sentado, le envolvio entre sus frios brazos y dejo que el menor descansase la cabeza en su hombro. No era necesario decir que el tambien sentia aquello... pero algo mas ocurria - ... pasa algo?...

Fijo sus ojos sobre ese lugar tan frio y gelido, palido, casi tan blanca como la misma nieve pero si sabia esa respuesta, si era algo normal entre los huamnos a temerle a lo que mas soportaban, olvidaban en algunos años pero sabiendo que regresaria por ellos algun dia

Se aferro a su cuerpo con ambas manos mientras acariciaba esa piel tan helada y que tanto le gustaba

-...no se si es miedo...Kei....pero me siento algo, algo extraño, extraño por que se que sera dificil.
Muchos temen a aquello que se desconoce, que nos deja en el olvido yo, tengo que decir que siempre le he temido a la muerte. Tu, tu que eres imnortal no podras seguirme ¿verdad?, Los humanos morimos pero no quiero hacerlo si tu estas aqui, es solo eso...queria decirtelo, mi miedo de perderte, de que me olvides cuando..parta-

Su mirada se encontraba clavada en el cielo que alcanzaba a asomarse, en apenas esos debiles rayos de luz mientras escuchaba sus palabras... en silencio, cerro sus ojos y suspiro. Realmente no tenia pensando decirle lo que habia decidido aquella misma noche.

- ... y quien dice que no puedo seguirte? - pregunto con suavidad, abriendo nuevamente sus orbes y clavandolas en esos rubies que le volvian loco de tan solo echarles un vistazo, sonriendole amorosamente, con sinceridad - Tu miedo es algo tonto... despues de todo esto, quien podria olvidarte Raziel? Te amo, y si no me crees te lo repetire mil veces de ser necesario... te amo, y por eso no soporto la idea de que algun dia tengas que morir... para mi el tiempo se ha detenido hace ya mucho, pero nada dura para siempre. Esta misma noche decidi que si tu partes, yo te seguire lo mas pronto posible... el fuego es mi debilidad, tal como el agua lo es para ti... pero yo no le temo y soy capaz de lanzarme a las llamas solo por ti

-Aun asi, mientras las cosas cambien estarias conmigo?-

Cerro sus ojos aun apoyandose en el cuerpo del vampiro, como un templo en el cual solo la mas pura tranquilidad se escondia y se abria para el

SOnrio, si, tal vez ahora era tanto, pero el miedo ahora era grande.
POdria decir que jamas se le habia ocurrido temerle a eso tan natural del humano pero solo era cuando se creia estar solo, ahora las cosas habian cambiado

Tenia a alguien por quien resistir todo, y morir no era ya una obligacion, paso a una opcion que debia fijar, y disfrutar todo el tiempo al lado de ese hombre qu aun lo sostenia en sus brazos, ese templo de paz que lo curaba de sus heridas de tristesa

Beso su frente y abrazo ese rostro tan bello que poseia aquel vampiro, tan puro para el, tan dulce y bello

-y siempre sera asi. por esto, sere fuerte kei(aunque duela)-

- Por supuesto... no lo dudes... aun cuando el tiempo pase yo seguire a tu lado siempre, Raziel...

Jamas habia considerado la opcion de enamorarse de un humano, jamas habia pensado en lo que eso significaria, el cambio tan radical que seria su vida desde ese mismo momento en que le viera... no bebia de humanos, eso, a pesar de ir en contra de su naturaleza, le consideraba un acto realmente odioso...

Si bien ya antes le habian dicho que era deliciosa la sangre humana (y no les faltaba razon) y que les volvia aun mas fuertes de lo que parecia al acabar de alimentarse el jamas se aseguraria de que esas palabras fuesen ciertas. La vida de los vampiros, los angeles, los demonios... todas eran largas, todas eran realmente duraderas si no les asesinaban... en cambio... la vida humana era tan efimera, tan solo como un corto suspiro en la propia...

Pero habia una opcion... el pensar siquiera en ella le provoco un escalofrio; oculto por suerte en el abrazo y el beso de aquel precioso humano. Sintio ganas de llorar por unos momentos.

- ... Raz... se que quieres estar conmigo con las mismas ganas que yo, vencer a la muerte... hay una opcion para que sea asi, al menos si es que algun dia alguno termina asesinado... - le susurro al oido con toda la suavidad que podia, rodeando con un brazo su cintura y apretandole un poco contra su, para el, helado cuerpo.

No queria recurrir a eso... esperaba que el azabache se negase ya que seria peligroso y tal vez hasta le ofenderia... pero realmente lo necesitaba a su lado, tal como el joven necesitaba del aire que respiraba minuto a minuto.