Habitacion de Raphael

Fuera del cuarto, la luz d las lamparas se debilito... una delgada y agil sombra se aproximo a la puerta en completo silencio, pegando una palida oreja a la misma... nada, solo una muy tenue respiracion se notaba adentro d la habitacion, alguien durmiendo... - Bien...
Con gran cuidado, penetro en la habitacion mientras las luces del pasillo volvian a la normalidad... con rapides, se oculto tras un gran armario mientras sus ojos esmeraldas miraban con gran curiosidad al angel.

Ladeando con ligeresa su cabeza, salio de su escondite en silencio y deshaciendose de la capa que llevaba puesta. Sus alborotados cabellos azabaches quedaron a la luz al tiempo que se sentaba con delicadesa en la orilla de la cama, mirando con fijesa al angel.
- Como le envidio... poder dormir con esa tranquilidad.... - susurro por lo bajo, sus esmeraldas rebelaban la curiosidad y ligera tristesa que sentia en el fondo, solto un suspiro al escuchar aquellos murmullos.

Su cuerpo se congelo en cuanto sintio como el otro se movia, aunque solto un gran suspiro aliviado al ver que no le reconocia... sus palabras hicieron k ladease la cabeza, no debia hacercarsele demasiado por 2 buenas razones.
1era? Por que la gelidez natural de su cuerpo vampirico podria alertar al angel.
2do? .... porque aquel ser celestial olia increiblemente bien, la boca se le hacia agua de tan solo pensar en ese sabor dulzon y espeso k podria ofrecerle...
Empuño las manos con los labios fuertemente apretados, enojado consigo mismo. El jamas habia bebido sangre humana ni angelical.... y seguiria siendo asi.... sus labios se curvaron en una sonrisilla traviesa; eso no queria decir que no pudiese jugar un rato.
- Mmmm... esta bien....
Con cuidado, y asegurandose de retener la respiracion, se acosto a su lado... paso su mano palida por los cabellos plateados del angel, acariciandoles con ternura. No podia evitarlo... realmente no era un "ser" precisamente malo.

Su expresion se mantuvo serena a pesar de los actos del angel, enterro con ligeresa el rostro entre aquellos cabellos y sin poder reprimir un suspiro placentero al permitirse oler con disimulo el aroma tan delicioso k emanaba de ese joven, rodeo con suavidad el esbelto cuerpo entre sus gelidos brazos.
- No deverias de acercarte tanto... - musito en un susurro sensual junto a su oreja, dejando que su aliento tibio callese sobre aquel delicado y claro cuello... con un carraspeo ligero, alejo su mirada del mismo.

Serenamente, volvio a acariciar sus cabellos al verle temblar...

- Soy... alguien que no deveria estar aqui... no me considero un espia... pero es peligroso para mi este lugar... - respondio con suavidad, posando sus labios gelidos en aquella tibia mejilla antes de desvanecerse de su lado... ahora se encontraba parado a un lado de el, con los labios curvados en una sonrisa traviesa.

Deveria de haber seguido en los pasillos o al menos salir en cuanto noto que el angel estaba semi despierto, pero no, ahora se encontraba ahi, hablando tranquilamente con alguien que podria atacarle en cuanto reconociera la especie a la que pertenecia.

Alzo con elegancia una ceja, reprimiendo la carcajada que habia estado a punto de soltar.

- Un angel? Acaso te lo paresco?... - con un chasquido de su lengua, se cruzo de brazos mientras que su mirada esmeralda se perdia entre los vitrales de las paredes - ... no, no soy un angel... pero tampoco un demonio...

Se sento a su lado sin mostrar desconfianza, ya habia tratado muchas veces con Nanael antes como para darse cuenta que los angeles eran seres mas bien inocentes y algunas veces despistados, sin darse cuenta de verdad del peligro que podria rodearles...

- Para mi puede llegar a serlo... no creo que a los angeles guardianes les haga mucha gracia saber que un vampiro se ha colado en este lugar - respondio, esbozando una gran sonrisa que dejaba a la vista sus delicados pero filosisimos colmillos - Y me llamo Kei...

Curioso, el angel habia sonreido... al parecer, no creia que fuese a atacarle. Ese pensamiento le hizo sonreir con diversion.

- El gusto es mio, Raphael... - ladeo la cabeza, como pensandoselo - En realidad, no tengo una razon concreta... simple curiosidad creo... esta es la 2da ves que ando por aqui, y sigo llevandome una que otra sorpresita...

Le miraba de reojo, sonreia aun pero sus colmillos volvian a estar ocultos... aquel angel era hermoso, jugar o no jugar?... nah, lo mejor seria que no... aunque no sentia nada de sed, le quemaba la garganta de tan solo olisquear su aroma.

- Gracias, supongo... realmente ha sido facil, mi velocidad lo hace un juego de niños ademas... - con una sonrisa se desvanecio cual fantasma, reapareciendo recostado boca abajo con la cabeza entre los brazos y sonriendole - Si, tu y otro angel son las sorpresas a las que me refiero...

Dejo su rostro entre los largos cabellos del joven, suspirando de mero placer ante el aroma que guardaban... se mordio por unos instantes el labio antes de relajarse por completo.

- Lindo cuarto por cierto... y no, estaba cerrada... - ladeo la cabeza antes de rodar por la cama y pararse nuevamente de un salto agil. Los angeles eran lindos, pero muy inocentes...

Ladeo con curiosidad la cabeza ante su sonrojo, antes de notar la razón; suspiró algo enfurruñado, le gustaba la sensualidad que poseía como vampiro pero a veces se volvia un fastidio…

- Hmm? Asi es… no se si le conoscas, se llama Nanael – evito su mirada por el momento, llevándose nerviosamente una mano a la nuca mientras esbozaba una sonrisa apenada – Puueeess…… es algo difícil de explicar, los angeles son seres muy curiosos a mi parecer jeje…

Lo mejor seria no volver a entrar a esas zonas, siempre que encontraba a un ser celestial terminaba simpatizando con el… lo peor de todo es que Raphael tenia un aroma sumamente exquisito y mucho mas atrayente que Nan, seria un peligro seguir allí.

- Emm… creo que tendras que disculparme… lo mejor seria que saliese de aquí… - declaro en un susurro suave y evitando que sus brillantes ojos verdes se cruzaran con los de Raphael… o con cualquier parte de su cuerpo.

Enmudecio por unos instantes ante su petición, sorprendido y a la vez… horrorizado?... no, esa seria una exageración, pero si algo inquieto. Aunque… en la tierra tal ves pudiese controlarse un poco mejor, aun asi, por si acaso lo mejor seria… prevenirle

- Si ese es tu deseo… si puedes… - sus labios se volvieron una media sonrisa, mas que seductora al tiempo que se inclinaba para tomar con suavidad su mentón - … pero te advierto, podria atacarte en cualquier momento… recuerda cual es mi naturaleza, y sobre todo… de que me alimento

Como añadiéndole a su advertencia, poso sus labios gélidos sobre la delicada garganta del angel… en vez de morderle o exponer sus colmillos, simplemente deposito un pequeño beso en la misma antes de enderezarse aun sonriéndole.

- Sin embargo… eres lindo… - dio media vuelta con ligeresa, como si flotase, y metió sus manos en los bolsillos del pantalon sin dejar que Raphael viese la expresión algo torturada que ahora apareció en su palido rostro – Y en lugar de beber de ti… podria intentar satisfacer otro tipo de… tentaciones

- No te escuchas muy seguro… - volteo a verle por sobre su hombro, sonriendo apenas – Y si… podria haber bebido de ti desde hace tiempo… pero aquí cualquiera podria entrar de repente en mi distracción y tratar de matarme

Inclusive el trataba de tragarse esa mentira, se maldeciría por siempre si su lado vampirico terminaba apoderándose de el hasta abalanzarse sobre el peliplateado… tuvo que dejar de respirar, cosa inútil ahora como neófito que era pero por mera costumbre, al notar ese adorable sonrojo en las mejillas de Raphael.

- Creo saber en lo que estabas pensando… - solto con una leve risa, ladeando la cabeza con una sonrisa alegre ante su pregunta – Eso mismo me pregunte hace tiempo, pero Nanael me mostro una salida secreta en los Campos Celiceos…

Por cierto, que tenia que agradecerleselo de nuevo; sin esa información tal ves no se hubiese colado de nuevo en el cielo… entreabrió con cuidado la puerta, dejando que su vista de águila recorriese el pasillo y su olfato le aclarase que no había nadie cerca; salió regalándole una sonrisa al angel.

Aquel lugar era solitario a pesar de todo, solo una vez tuvo que desviarse del camino debido a la esencia conocida de otro ser celestial… tenia una sensación incomoda al tener a Raphael detrás suyo, no solo porque asi se sentia un poco desprotegido, sino que ademas sentia la mirada del otro clavada en el… lo ponía nervioso ese hecho.

- No, ya casi llegamos… - volvió sus pasos mas lentos para poder llegar a la altura de su acompañante, con una sonrisa mas bien amable tomo con suavidad una de las manos de Raphael antes de internarse con el entre los arboles frutales que había en esos campos…

Buscaba un aroma en especial, el propio… al final noto que uno de los tantos arboles de ahí tenia una curiosa marca en forma de pentagrama; sonrio triunfal, el mismo la había hecho poco antes de penetrar en ella. Sin titubear siquiera, camino directamente hacia el grueso tronco y cuando parecía que iba a estrellarse contra el lo atravesó como si no existiese, aun con una mano entrelazada en la del peliplata.