Habitacion de Raphael

Se detuvo cuando cruzaron el árbol, le miraba directamente con una sonrisa tierna debido a su reacción. Ok… los angeles le afectaban, enserio… tenia que alejarse de ellos, y de los humanos igual… por su propia seguridad y cordura.

- Te encuentras bien, Raphael? – un ligero tono preocupado se noto en su voz.

En cambio, los alrededores seguían siendo de un puro y muy denso bosque; mas a diferencia de antes, este bosque era mas sombrio y se notaba la diferencia que había entre el mismo y el de los campos celiceos. Soplo con ligeresa una hoja que iba a caer sobre su nariz, pensativo.

- Pues tenia pensado dirigirme a mi… hogar – le miro de reojo, sonriéndole como disculpa – Pero ahora es mejor no ir, en estos tiempos no se sabe ya de quien te puedes fiar… no es que desconfie de ti, Raphael, pero tal ves no sea bueno que sepas la ubicación de mi “guarida”… quieres ir a algún lado en especial? No tengo nada mejor que hacer je

Un pequeño ? apareció sobre su cabeza al ver sus reacciones; sin embargo un débil rubor subió hasta sus mejillas al ver aquella sonrisa. Dio la media vuelta lo mas rápido que pudo para que no le viese. Raphael era simplemente muy dulce.

- Hmm… supongo que lo mejor por ahora será ir a la villa que se encuentra cerca de aquí – comento algo distraído e inclinándose inconscientemente, agachando un poco la cabeza con pena al darse cuenta – Sube a mi espalda, asi llegaremos mas rápido…

Apenas había anochecido por lo que pudo llegar a notar, unos pocos y débiles rayos de luz atravesaban el cielo casi oscuro… si, la villa era un buen lugar, ya había estado ahí en varias ocasiones… y ademas le gustaría platicar mas tranquilamente con el angel, el bosque no era un lugar precisamente adecuado para ello, tomando en cuenta que había seres casi tan peligrosos como el y su aroma se volvia casi sofocante ahi.

Noto que los movimientos del otro eran un poco torpes, se pregunto con algo de diversión como estaría su rostro ahora mismo.

- Hm? No te preocupes por eso, no pesas nada – declaro alegremente, enderezándose un poco mientras aspiraba el aire nocturno profundamente… - Ok… sujétate fuerte o te caeras

Un segundo después de la advertencia desaparecieron de allí, en ese mismo instante se encontraba corriendo a una pasmosa velocidad ya a varios metros de donde había aparecido. Se sentia bastante comodo ya en aquella situación, conocía el bosque como la palma de su mano y no representaba reto alguno el evitar que chocasen contra los arboles a pesar de la velocidad a la que iban.

- Te sientes bien? – pregunto tranquilamente, ahora daba ligeros pero rapidos saltos sobre las ramas… no estaban demasiado lejos de la villa, el aroma a humanos se hacia cada ves mas notorio.

- Tranquilo, ya me lo había imaginado… - declaro con suavidad, dando un salto un poco mas fuerte que le hizo salir de entre la espesura del bosque y quedarse unos instantes en el aire, a lo lejos se veían luces… cayo con ligereza sobre otra rama y siguió con su carrera.

Aquello era extraño, ya se le había hecho costumbre que cualquiera se le subiera a la espalda o qué? Dejo ir un suspiro, esquivando al mismo tiempo un par de ramas. Trataba de mostrarse frio o simplemente sádico ante la vista de los demás, como típico vampiro… pero no, siempre terminaba sacando su naturaleza amable… ya no sabía a quien odiar, si a su lado vampírico o si al lado humano!!

Inconscientemente, esbozo una sonrisa dulce ante sus palabras… pero aquella tímida caricia le hizo sonrojarse ferozmente… y resbalar sobre la rama en la que había puesto el pie.

Ni tiempo de gritar le dio por la misma sorpresa, lo menos que pudo hacer fue girar sobre si mismo con la poca flexibilidad que tenia libre debido a cierto ángel en su espalda y estamparse boca abajo en el suelo ya próximo. Por lo menos Raphael no había sufrido daño alguno.

- Ughhhhmm…….. – un gruñido incompresible se escucho, aun en el suelo lleno de hojas cual vil hormiga apachurrada.

- Ahh... cof cof - tosio un par de veces mientras se levantaba, sacandose de la boca un par de hojas con un gesto de desagrado - Puaj... nah, no importa

A pesar de lo ocurrido se le escapo una debil risa, algo avergonzada mientras agitaba la cabeza para deshacerse del polvo.

- Ya no importa eso... aunque dolio - vuelve a reir y se sacude un poco mas, avanzando de nuevo en la direccion en la que iban a pasos tranquilos. Le habia tomado de la mano y caminaba a su lado, la verdad, ese golpe le habian quitado las ganas de seguir corriendo... aun le dolia la cara.

Alzo una ceja cuando empezo a hablar, curioso de saber que decia... sus labios se curvaron en una sonrisa algo divertida pero cariñosa cuando finalmente logro soltar lo anterior. Volteo por ensima de su hombro para poder mirarle fijamente ante aquel agarre tan confiado... sin duda alguna era un angel.

- Gracias por ese comentario - dijo con voz suave y algo amable, refiriendo a lo de su risa - ... no te preocupes Raphael, ya me encuentro bien

Dio una corta mirada a sus alrededores; frente a ellos se encontraba un claro y la hierba de los alrededores se veia muy suave, justamente como para alguien que no tiene nada mejor que hacer que tirarse en el suelo y echarse un sueñito. La leve sed que sentia ante el aroma de aquel angel incremento notablemente cuando el viento cambio de direccion, llevandole con fuerza hasta su nariz ese hipnotizante aroma.
Antes de que algo mas sucediese, ya le habia acorralado contra uno de los tantos arboles, entrelazando suavemente sus piernas con las del peliplata justo al tiempo que enterraba su rostro en aquel apetecible cuello.

- ... estoy empezando a pensar que lo mejor seria que tu fueses a la villa y yo me quedase aqui... - le susurro al oido, con cierto aire sensual propio de los de su especie y rozando con sus labios su delicado cuello.

- ... no sabes lo que dices... - declaro en un susurro apagado.

Miro de reojo el rostro de aquel angel, especialmente sus mejillas que aun conservaban ese tono dulce tono carmin y su voz temblorosa, esta claro que aquellos cortos gemidos no le habian pasado por alto en ningun momento. Presiono un poco mas su cuerpo contra el de Raphael, tomando sus muñecas en un gesto repentino y dejandolas pegadas al arbol, justo arriba de la cabeza de aquel apetecible y atrayente ser... una sonrisa divertida habia aparecido en sus labios.

- Que hago?... Raphael... sabias que la sangre de los angeles es especialmente deliciosa?... sobre todo para los que gustan de la que deja un regusto dulzon... como a mi - dejo caer su aliento en su terso y delicado cuello, habia expuesto sus colmillos y rozaba con los mismos lentamente su piel, sin llegar a penetrar en la misma aun - ... tu aroma me seduce... no sabes los deseos que tengo de beber de ti... y de hacer otras cosas aun menos decentes contigo... de manera resumida, poseerte

- Si... - le susurro al oido, luchando por mantener la serenidad que aparentaba a pesar de que en su interior se retorcia completamente, su cuerpo se estremesia, demandandole el dulce elixir que necesitaba para vivir que ese bello angel solo podia darle.

Muy a su pesar y con bastante desgana, oculto nuevamente sus afilados colmillos, sustituyendoles con sus labios que recorrian de arriba a abajo toda su piel, desde su garganta hasta practicamente su nuca. No podria resistir mucho mas a la tentacion, en realidad, realmente no queria terminar bebiendo de el... pero su cuerpo le habia atraido en cuanto le habia mirado, no se iria de ahia hasta que tuviese lo que deseaba.

- Tu... que? - murmuro no sin cierta diversion, evitando a como de lugar que el angel juntase sus piernas de nuevo... aunque en el proceso se dio cuenta de cierto problemita que Raphael al parecer habia empezado a tener en su entrepierna; con una suave risa, rozo con su rodilla esa misma zona aun sobre la ropa.